jueves, 2 de julio de 2015

Cronikas Junkies

Al llegar a los 25 (antes ya habia probado porros y alguna pastilla
pero de farmacia) tuve mi primer contacto con la H.
Cuando yo tenia 20 años ibamos en un grupo de chicos y chicas de los cuales la malloria eran "fumetas" nada mas.
Bueno, pues yo tenia un primo el cual estaba superenganchadisimo a la aguja con H.Yo veia su comportamiento y decia:
"En mi vida yo haria lo mismo que el hace"...Ya sabeis el dicho:......
La cuestión es que un dia ,despues de haber metido unas rallas de coca de la buena,estaba un poco acelerado y uno del
grupo me dijo: ven que vas a probar algo"especial" .Así fué! le pegué 2 caladas en la plata y a la 3ª, noté que todo era
tranquilidad,calma ,plenitud, despues un poco de Euphoria,....sensaciones que solo se experimentan las primeras veces
pues luego el cuerpo crea Tolerancia.....que os voy a contar...Zarathustra, no existe tal agobio en nosotros, lo que hay es una enorme impotencia por no poder ayudarte de otra forma que virtual. Preocupan tus penas y esa sensación que transmites de encontrarte solo ante ellas. Es probable que si alguien hubiese estado a tu lado durante esta difícil etapa no hubieses necesitado recurrir al Fentanilo. Lo cierto es que casi habías superado el SAO, ese síndrome que cuantas más veces se repite más insoportable se vuelve.

No conozco mucho sobre sustancias, pero sé que el Fentanilo puede ser peligroso. Te preguntas qué harás en 15 días cuando se te acabe y yo, sin entender realmente por lo que estás pasando, me atrevería a pedirte que fueses reduciendo la dosis diaria para evitar, al término de estas dos semanas, padecer un nuevo SAO. Tal vez Hamal pueda decirte si la Codeína o el Tramadol, en dosis prudentes, te ayudarían a sobrellevar la espera hasta que el CAS decida abrirte de nuevo sus puertas. En cualquier caso, me alegra saber que hoy vas mejor ya que puedo imaginar lo duro que ha sido y es para ti vivir en la incertidumbre de saber si algún día podrá serte dispensada la Metadona. Confiemos en que sí.

Confiemos que el joven sera capaz de no recurrir a las drogas por voluntad
y encontrar  respuesta en la meditación.
pues más vale una onza de práctica que una tonelada de teoría.
Asi que animo delincuencia
Ese es mi deseo, Zarathustra,
aunque solo pueda hacerlo tras una pantalla.

Codeina??? saca!! ,Tengo heroina, heroinsxa
para potencializar opiatos es con difenhidram, difenhidraminó, difenhidraminaa*
disculpame ando superzombie.
Me corte el dedo con una sierra de mesa. y me mandaron analgésicos pero no me hacian efecto
ibuprofen. paracetamol. tranlmadollp, ketorolaco, diclofenacp. naproxeno
pero mi mi mano dolia como el demonio y nada me hacia efecto.
me comia 4 pastillas cada 2 horas y nada, despues d k me arrancaran la uña me reconstruyeron los dos tendones y taladraron la utima falanje y por ahi metieron unas extenciones cosidas a los tendones me desforraron el hueso y limpiaron y armaron un rompecabezas en los cachitos de piel colgantes a los lados y me pusieran una uña bionica de aluminio pero imaginate cuando se me baje la anestecia
entonces como ya no tenia opcion. q me meto al mercadonegro.con a unas 3 puntadas de terminar y se me bajaaa
y siento como si te doblaran el dedo para atras y lo rompieran  al mismo tiempo te quemaran toda la piel de la mano. y te dieras un machucon en la punta con martillo o puerta y .com como si te enterraran algo grande abajo de la uña todos esos dolores y sensaciones al mismo tiempo y q le digo al señor:

mandame 3 ampoyetas de buprenorfina. 2 pastas de morfina y un cuarto de gr de heroina pura
porque los otros no me hscen nada y ya no tengo ni una aspirina, doblandome de dolor me di las dos bupre(opiato) y haass por fin deja de doler y jasta me puso feliz, Al otro dia 12 horas despues re la ultima dosis del opioide comienzan los dolores
Asi q recorde una amiga soño la nnoche anterior q su abuelo moria. y ella robaba sus medicinad (morfina) para mi y le hable y la convensi de k me regalara 2 y ya la viva las 4 justo a las 12 horas de la ulrima y ese dia la libre. y k en la noche le hablo al jacinto
le pido heroina. pues ya no hay nada mas y me da el ultimi ultimo cuarto de gr de toda la h q ya no habra mas
y compro 2 botrs de tramadol pa bajarme de la loka pero, pero lo cagado es q lo unico q me quito el dolo fue inyeccion de peric
y pues me lo di con un ribotrol pa los nervios, pero literal me anestecio y claro in par de chivas y un tabakiro pal exploto...
Recuerdo q una. morra queria unas rastas y yo le dije k un trueque por drugsy  ya en la mañana la vi. por la ultima buprenorfina
la ultima droga anti dolor superfuerteentonces es uns señal divina q vengas tu ahora con codeina

Un leve pesar, un menudo goce de niño, agrandados desmesuradamente por una sensibilidad exquisita, se vuelven más tarde en el hombre adulto, incluso a pesar suyo, en principio de una obra de arte. Finalmente, para expresarse de manera más concisa, ¿no sería fácil probar, mediante una comparación filosófica entre las obras de un artista maduro y el estado de su alma cuando era niño, que el genio no es más que la infancia formulada nítidamente, dotada ahora, para expresarse, de órganos viriles y poderosos! o algo asi no?--------Un comedor de opio. Charles Baudelaire

A principios del siglo XX, en los medios de comunicación estadounidenses, los temas favoritos eran los negros cocainizados hasta la exasperación, los chinos en siniestros fumaderos, los mexicanos montando orgías con marihuana y a nivel del alcohol, las consabidas acusaciones a irlandeses e italianos.
En medio de este clima un diputado por Vermont propone al Congreso de los Estados Unidos una ley para prohibir todo tráfico y uso no estrictamente médico de opiáceos, cocaína, hidrato de cloral y cannabis "por mínimas que fuesen las cantidades". La mayoría de los médicos y farmacéuticos critican y rechazan el proyecto porque a raíz de la Ley sobre la Pureza de los Alimentos y las Drogas, sus ganancias se han incrementado considerablemente.
El gobierno estadounidense no se detiene y en 1912 organiza la Conferencia de La Haya. Ofreciendo mayores descuentos arancelarios, consigue la aceptación de un Convenio que limita a "usos médicos y legítimos" el opio, la morfina, la cocaína y cualquier nuevo derivado de éstos "que pudiera dar lugar a abusos análogos". Alemania, Portugal, Holanda, Japón, Rusia, China e Italia se comprometen a examinar la posibilidad de dictar leyes o reglamentos que castiguen la posesión ilegal de las sustancias mencionadas y a tomar medidas para la exportación de opio a los países que deseen limitar su entrada. Francia, Persia, Siam e Inglaterra (que para esas fechas exporta ya cuarenta toneladas de morfina al año), los suscriben bajo reserva.
Debido a que la escasez de firmantes hizo que el Convenio quedase en suspenso, dos años después se lleva a cabo otra conferencia en La Haya que no tiene gran relevancia puesto que justo en esos días ocurre el asesinato del archiduque Fernando de Sarajevo y estalla la Primera Guerra Mundial. No obstante, la delegación estadounidense regresa a su país dispuesta a prohibir de una vez por todas los psicoactivos que tanto le molestan.
Captar votos de ciertos grupos étnicos era muy usual en la política y el ataque al consumo de psicofármacos era un juego político bastante redituable, pues se ganaban muchos más votos de los que se podían perder, así es que sobre la base de que ya se había firmado un acuerdo internacional, en 1914 se aprueba la Ley Harrison que regula la inscripción administrativa de fabricantes y dispensadores de opio, morfina y cocaína, previendo sanciones para el incumplimiento.
Según describe Escohotado, las condiciones del pacto fueron simples: médicos y farmacéuticos obtendrían un sistema de rigurosa exclusiva para cocaína, opiáceos y cualquier otra droga merecedora de control a su juicio. A cambio de ello, la Asociación Médica y la Asociación Farmacéutica "apoyarían los postulados básicos del Prohibition Party, planteando el consumo de psicofármacos como una epidemia súbita y virulenta, extraña a las esencias americanas." (9)
Los encargados de hacer cumplir esta nueva normatividad, los agentes antinarcóticos, dependerían del Departamento del Tesoro y no de Justicia "pues se trataba de delitos sin víctima física, finalmente idénticos al contrabando, y por lo mismo inadecuados para las brigadas de lo criminal." (9)

La aplicación de la ley genera todo un mercado negro y termina revocando la autoridad de médicos y farmacéuticos para dispensar psicofármacos ya que se instaura un sistema de persecución infiltrando a policías vestidos de civil en farmacias y consultas médicas. Casi 40,000 profesionistas serían aprehendidos entre 1920 y 1930 por "conspiración para violar la Ley Harrison". Pero lo más escandaloso es la estratagema mediante la cual esta ley estadounidense termina exportándose al resto del planeta: en 1919 se incorporan los Convenios de la Haya en la sección 295 del Tratado de Versalles con el que finaliza la Primera Guerra Mundial. Esto hace que prácticamente todo el mundo suscriba las cláusulas acordadas por sólo doce países en 1912 (Estados Unidos como promotor, siete que lo apoyaron incondicionalmente y cuatro más que firmaron bajo reserva).

¡Oh, opio, sutil, justo y conquistador de todas las cosas! Que traes consuelo a los corazones de los ricos y los pobres, a las heridas que nunca cicatrizarán y a los “tormentos que tientan al espíritu con la rebelión” traes un bálsamo que apacigua. ¡Opio elocuente! Que con potente retórica consigues disipar los propósitos de la ira, que siempre te muestras propicio a la misericordia y que en una noche de sueño celestial haces que el hombre culpable regrese a las visiones de su infancia, lavando sus manos ensangrentadas. ¡Oh, opio, justo y virtuoso! Que presentas ante la Corte de los sueños un falso testimonio para el triunfo de la inocencia desesperada y que detestas el perjurio e inviertes las sentencias de jueces injustos, tú construyes ciudades y templos sobre el corazón de la oscuridad, fuera de la fantástica imaginería del cerebro, superando el arte de Fidias y de Praxíteles, superando el esplendor de Babilonia y Hecatómpilos, llevando “de la anarquía del sueño” a la luz del día los rostros de bellezas largo tiempo enterradas y los benditos semblantes familiares, limpiándolos del deshonor de la tumba. ¡Tú solo otorgas esos dones al hombre, tú tienes las llaves del Paraíso! ¡Oh, opio justo, sutil y poderoso!